Por: Dr. Yubert Pereyra, vice capeyán de la Fundación Yogurt.
El Cangrejo es un pariente cercano de los arácnidos, un primo indeseado de las cucarachas y un hermano no reconocido de las pulgas de mar, que habita en ciertos lugares preferentemente húmedos o acuosos cercanos a las costas de Macedonia, Madagascar, Moctezuma y otros terruños compartimentados que guardan una configuración molecular similar. Dentro de la enorme especie Cangrejo, encontramos varios subtipos o categorías, un tanto difíciles de ubicar en la guía de calles, pero relativamente fáciles de localizar en las páginas amarillas: el cangrejo de río, el cangrejo de arroyo y el cangrejo de charco producido por las intensas lluvias y/o por cañerías rotas.
El cangrejo tiene hábitos de vida poco ortodoxos, considerando lo que hacen los demás equinos. Es un animal de hábitos nocturnos o también vespertinos, que sale de su cueva alrededor de las siete u ocho de la noche y no regresa hasta las cinco de la mañana, cuando lo ha perdido todo en apuestas y peleas ilegales de gallos aún más ilegales, por lo que se ve obligado a rematar su habitáculo para pagar las deudas.
En cuanto a su alimentación, podríamos decir que el cangrejo es un animal omnívoro, porque se alimenta de OVNIS o tal vez de OMNIS, pero también suele comer toda clase de pescado, ya sea enlatado, frito, a la plancha, al horno con papas, aunque estudios recientes han demostrado su intolerancia a la salsa tártara. También es común ver cangrejos alimentándose de restos de otros cangrejos dejados por peces más grandes que los devoraron previamente, o restos de camarones, dejados allí por los propios camarones que se fueron a un cóctel. Es muy extraño ver cangrejos en un cóctel, sobre todo cuando es de camarones, ya que su enemistad con estos anélidos les impide organizar fiestas y pijama partys, pero no así bautismos y bar mitzváhs.
El cangrejo suele aparearse unas cuatro veces en toda su vida, siempre y cuando consiga una cangreja dispuesta a llevar a cabo el extremadamente complejo ritual de apareamiento que conlleva el suicidio mutuo de ambos participantes, más la intervención de Omar Gutiérrez como mediador en el asunto. La hembra puede llegar a depositar entre tres y ocho mil huevecillos, que quedarán a cargo del macho durante los próximos cuarenta años de desarrollo de las crías, ya que la madre suele fugarse de compras con sus amigas. Mientras tanto, el macho debe cuidar a las crías y también el territorio, y defenderlo de los ataques continuos de otros murciélagos que golpean sus ventanas una y otra vez, y de cangrejos oportunistas ladrones que aprovechan la rotura de las ventanas para colarse en la casa y robarle la jubilación. Las peleas con otros cangrejos suelen derivar en pinzas quebradas, patas torcidas y discusiones político partidarias que terminan en juegos como el pinball o el pac-man, pero nunca el War o el Teg.
Bueno, amiguitos es todo por hoy en el Fascinante Mundo Animal. ¡Hasta la próxima!
Imagineision tu de pagüer!!!
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